viernes, 3 de mayo de 2013

El papa Francisco clama al cielo contra la esclavitud laboral en Bangladés


El papa Francisco clama al cielo contra las condiciones de esclavitud de muchos trabajadores en Bangladés. Con la celebración del 1 de mayo como telón de fondo, el Sumo Pontífice ha recordado a las víctimas del colapso del edificio de talleres textiles que se vino abajo la semana pasada en las afueras de Daca. “Ganaban 38 euros al mes, eso es un trabajo esclavo”, ha dicho durante la homilía de su misa matutina. Poco después, en la Plaza de San Pedro ha denunciado “la concepción economicista de la sociedad que busca el beneficio egoísta mas allá de los parámetros de la justicia social”.

El Papa también ha pedido a los políticos europeos un mayor esfuerzo para revitalizar el mercado de trabajo en el viejo continente, en algunos de cuyos países, como España o Grecia, la tasa de desempleo ha alcanzado cotas históricas.

El Papa Francisco recibe a Benedicto XVI en su regreso al Vaticano

Gracias a la ''mudanza'', por primera vez  en la historia conviven
dos Papas en El Vaticano, uno Emérito y el otro reinante.

CIUDAD DEL VATICANO (02/MAY/2013).-  El Papa Francisco recibió hoy a su antecesor, Benedicto XVI, en la puerta del monasterio de clausura ubicado al interior de los Jardines Vaticanos donde el Pontífice emérito residirá tras haber renunciado a la guía de la Iglesia.
 
Poco después de las 16:45 horas local (14:45 GMT), Joseph Ratzinger llegó hasta El Vaticano a bordo de un helicóptero blanco y acompañado por su secretario personal, Georg Gaenswein, también prefecto de la Casa Pontificia.
 
En el helipuerto ubicado en la parte posterior del territorio pontificio, fue recibido por el decano del Colegio Cardenalicio, Angelo Sodano; por el secretario de Estado de la Santa Sede, Tarcisio Bertone y por el presidente de la Gobernación del Estado Vaticano, Giuseppe Bertello.
 
Con ellos se encontraban también Angelo Becciu, sustituto para los Asuntos Generales; Dominique Mamberti, secretario para las Relaciones con los Estados y Giuseppe Sciacca, secretario general de la Gobernación.
 
Tras los saludos de bienvenida, Ratzinger se trasladó en automóvil hasta su nueva residencia, el monasterio "Mater Ecclesiae" frente al cual lo esperaba el Papa Francisco, "quien le dio la bienvenida con mucha cordialidad", según reportó la sala de prensa vaticana.
 
Juntos ingresaron en el edificio y se dirigieron a la capilla, para un breve momento de oración.
 
Ese fue el segundo momento de convivencia de los dos Papas, quienes se habían saludado por primera vez el 23 de marzo en la residencia pontificia de Castel Gandolfo, ubicada al sur de Roma, donde Benedicto XVI permanecía desde su renuncia al papado el 28 de febrero.
 
Fue el mismo Pontífice emérito quien eligió su residencia antes de su retiro, en la cual estará "escondido del mundo" como anunció en uno de sus últimos discursos públicos.
 
Se trata de un edificio construido a inicios del siglo XX, ubicado en la parte posterior del territorio vaticano y con vista a la Basílica de San Pedro.
 
La construcción está formada por cuatro pisos con ambientes en común y 12 celdas monásticas, un ala nueva de alrededor de 450 metros cuadrados, una capilla, el coro para las claustrales, la biblioteca, un pequeño jardín y un robusto muro que delimita la zona de clausura.
 
También cuenta con un huerto propio en el cual se cultivan chiles, tomates, calabacines, brócoli además de unos limoneros y naranjos. 
 
Con Benedicto XVI vivirán las cuatro mujeres consagradas de la comunidad "memores domini" que lo ayudaban con sus labores domésticas y Gaenswein. En el monasterio también habrá lugar para recibir al hermano, Georg Ratzinger.
 
Gracias a la "mudanza", por primera vez en la historia conviven dos Papas en El Vaticano, uno emérito y el otro reinante. De hecho Francisco reside a unos escasos centenares de metros del monasterio, en la residencia de Santa Marta.